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viernes, 13 de agosto de 2010

Golondrinas

Buenos Aires, 13 de agosto de 2010.

Un manto de nubes grises desafía la energía del sol y pierde la batalla condensándose en garúa. Las hojas de los árboles desprendidas por el viento vuelan cerca de la gente recomendándoles que la ropa sin uso sea obsequiada a quienes padecen frío.

En silencio salgo del cuadro transparente que me ofrece la ventana y siento una canción que me abre el pecho para escribir. Se recomienda acompañar la lectura con ésta música.

http://www.youtube.com/watch?v=SrNiFr9G_ko

Puedo decirles que todavía es invierno en Buenos Aires pero algunas golondrinas de frac azul marino empiezan a verse cerca del río anunciando la temprana primavera. Con detenimiento ya se observan en algunos árboles los primero brotes verde claro.

Es emocionante la solidaridad y el trabajo en equipo que realizan las golondrinas para atravesar el océano y llegar a nuevas tierras para reproducirse. Por si alguno no lo sabe, ese pintoresco vuelo en V corta tiene la brillante estrategia de resistir. La primera golondrina es la que ofrece resistencia al viento haciéndolo menos intenso para las que vuelan detrás. Éstas, a su vez, cubren el viento facilitando el trabajo de toda la bandada hasta el final de la hilera.

La primera, la que está en la punta de la flecha, al cansarse vuela hasta el final de la fila dándole paso a otra con más energía para que tome la delantera y así sucesivamente durante miles de kilómetros distribuyen la energía y la organización para atravesar el mar.

Algunas mueren y caen en el mar orgullosas de haber ayudado al la bandada a alcanzar la primavera para crear nueva vida en tierras cálidas.

La vida en éste hemisferio empieza a florecer, el cuerpo humano está floreciendo, es por eso que el encierro y las excesivas horas de trabajo con luz artificial generan malestar y angustia debido a que el cuerpo orgánicamente necesita luz solar como las plantas para realizar la fotosíntesis y de la solidaridad como las golondrinas.

Las cosas están cambiando, la tierra se está limpiando, partes de su torrente sanguíneo se está contaminado y como organismo vivo la tierra genera inmunidad como toda la vida orgánica ante el virus.

Todos estamos floreciendo, el sol cada ve está más cerca y algunas flores están mustias y otros tienen más fuerzas. Quizá haya que cooperar con amor así las flores débiles crezcan fuertes y perfumadas.

Cooperar con uno mismo para encontrar el equilibrio, la armonía y desde allí cooperar con los demás aunque sea en un pequeño gesto expresado en un buen día o en una sonrisa.

Ayudar a florecer en ésta nueva primavera que se acerca a nuestros compañeros, ayudándolos a encontrar algo en lo que les permita proyectar, soñar, algo en donde se puedan refugiar solos y encontrarse con uno mismo para que los momentos de plenitud nazcan de uno y se complementen a la felicidad de los otros.

Si la prioridad en el bienestar interior no es la de uno mismo, a falta de energía y claridad de pensamientos difícilmente se podrá cuidar de lo hijos, de las relaciones amorosas, laborales, personales.

Para que florezca el entorno, uno tiene que empezar por regar el jardín propio.

Creo que no estamos matando entre nosotros mismos y en este sálvese quien pueda no se salvará nadie. Ojo por ojo, diente por diente y todo el mundo terminará cegado decía GANDHI.

Quienes creen conducir el circo, están ahogándose en billetes verdes y los chanchos de las alcancías los seducen para llevárselos al chiquero.

Tengo una sincera intención de que desaparezca el dinero del mundo y deje de ser el virus del torrente sanguíneo o que sea empleado en su totalidad para la educación y alimentación de los niños en vez invertir en aviones de guerra.

Algunas mañanas de mi vida las dedico a correr y hacer un poco de gimnasia cerca del río para oxigenar el cuerpo, al llegar al final del recorrido hay un hermoso y frondoso árbol en el medio del camino.

A veces pienso cuanto tardará la sociedad en florecer a una mundo más armónico, de paz, amor e igualdad en la distribución de las riquezas naturales.

Imaginemos que el árbol del río en lugar de hojas cuenta con miles de billetes de cien dólares y la gente, cualquiera que pase, puede retirarlos siempre y cuando los necesite y mientras el árbol mantenga frondosos billetes seguirá dando dólares incluso mezclado con algunos euros. Todos sabemos que ese árbol en unas horas estará seco además de generar incidentes de violencia.

Ahora le otorgamos a nuestro a nuestro árbol de verdes dólares un campo energético que perciba las buenas vibraciones y el amor pleno de la gente.

Por lo tanto quién vibre en la sintonía del amor puede atravesarlo sin ningún problema, pero quien no tenga dicha vibración será electrificado o quemado o lo que fuere.

El árbol sobreviviría ya que los que logren atravesarlo apreciarían la belleza y cooperarían para que no se seque nunca.

Así funciona la evolución y la selección natural de las cosas, mientras no haya cooperación, tarde o temprano se secarán todos los árboles del mundo y sus frutos que son las base de la alimentación de muchas especies.

Se acerca la primavera, es tiempo de poda para florecer con fuerza, cooperemos como las golondrinas con nosotros mismos para poder trabajar en equipo y con nuestras compañeros en la selección de las ramas que hay que cortar para que nos llenemos todos de bellas flores y disfrutemos todos del mismo aroma.

Busquemos todos el sol y el mínimo buen gesto nos ayudará a todo para empezar a cambiar las cosas hacia un mundo mas pacífico y lleno de amor.

Que tengan un hermoso fin de semana al sol, empecemos con nosotros mismos para contagiar al resto de la mandada y miren hacia arriba que aparte de estrellas ya hay golondrinas.

Mucha luz.

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